Como decía en la entrada anterior este mes una autentica replica del año pasado. No podía ser de otra manera, la verdad es este triatlón merece la pena repetir año tras año.
Este año fui para allá con Jaime y un compañero suyo de club: Andy.
Las condiciones meteorológicas también se repitieron, no demasiado calor y viento del noroeste a 18-20 km/h. El agua bajo mi punto de vista estaba algo fresquita, no para utilizar neopreno pero fresquita, eso hizo que a la salida tuviera calambres en los cuadriceps y tardara una eternidad en realizar la transición. La bici fue durilla a la ida, el viento dificulto tanto el esfuerzo como la maniobravilidad (llevaba ruedas de perfil). Eso si, a la vuelta se volaba literalmente, había tramos en los que íbamos a 70 km/h.
La distancia de este triatlon es engañosa y pese a que aparentemente es algo mas que un olímpico, es bastante mas duro que un olímpico, casi como un media distancia diría yo. Eso se paga en la carrera a pie, como así fue, no me puedo quejar después de las lesiones de este año, pero imposible bajar de 5 y pico el kilometro. Al final 3:31:34.
Lo mejor el ambiente del pueblo que no paraban de animar (los chavales llevaban copia de la lista de dorsales para mirar el tuyo y gritar tu nombre y por supuesto, el avituallamiento final, una fidegua en la plaza del pueblo, obsequio de la organización que no se le puede poner ni una pega. El año que viene mas.
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